Buen día y excelente fin de semana para ellos y para Ellas. El día de
ayer leí este artículo y la verdad me causó sorpresa su contenido, deseo
compartirlo con Ustedes porque considero fundamental este pensamiento en un
persona que habrá de administrar los intereses de más de 120 millones de
mexicanos durante un sexenio, es mi sincero deseo, como el de millones de
ciudadanos que la moral permeé en todos los niveles sociales, pues la
necesitamos con urgencia si queremos realmente ser ese México que pronostican
que para el 2050 será un país líder, con cambios radicales que observaremos a
partir del 2030; todo gracias al empuje de nuestra juventud que está cambiando
y ya no quiere más corrupción, entre otros deseos igualmente válidos
socialmente.
El respeto por
nosotros mismos, la revolución moral que AMLO quiere
HENRY ROMERO /
REUTERS
“Podemos
fácilmente perdonar a un niño que tiene miedo a la oscuridad; la verdadera
tragedia de la vida es cuando los hombres tienen miedo a la luz" Platón.
El respeto por nosotros mismos es el núcleo de la constitución moral que tanto se la ha
criticado al presidente electo Andrés Manuel López Obrador desde que habló de
ella el 20 de febrero pasado.
Ese día, al firmar la alianza del Morena con el partido de corte
evangélico Encuentro Social, López Obrador dijo que hacía "el compromiso
de convocar a muchos ciudadanos, mujeres y hombres de buena voluntad, para la elaboración de una constitución moral, un código moral.
Así como existe una Constitución política, vamos a elaborar entre todos una
constitución moral".
La constitución propuesta por López Obrador pone el bien como deber
de todos los hombres, un código del bien. "Podemos figurarnos
la moral como una Constitución no escrita, cuyos preceptos son de validez
universal para todos los pueblos y para todos los hombres", se lee en el
documento que será el núcleo de la que podría considerarse "la
revolución moral" del morenista.
Se trata de la Cartilla Moral de Alfonso Reyes, la cual le fue encomendada en 1944 por el entonces secretario de
Educación Pública, Jaime Torres, en el sexenio de Manuel Ávila
Camacho, como parte de una campaña de alfabetización y que
sirviera de guía sobre los valores que todo mexicano debería seguir para
vivir dignamente en sociedad e integridad, apunta Carlos Eduardo López Cafaggi
en Nexos.
Su primera y más importante lección era "El hombre
debe educarse para el bien", como si se tratara de la
orientación que durante 13 años de
intercambiar correspondencia H.D. Thoreau dio a G.O. Blake para una vida más verdadera, como un Séneca y un Lucilio
decimonónicos, este documento también plantea la procuración de la prudente
armonía entre el cuerpo y el alma.
El político y articulista José Agustín Ortiz Pinchetti --quien
es parte del equipo encargado de redactar la constitución moral, junto a la
periodista Verónica Velasco; Jesús Ramírez, próximo encargado de la
comunicación social del gobierno entrante, y Enrique Galván Ochoa, colaborador
del diario La Jornada—confirmó que la Cartilla Moral de Alfonso Reyes será el núcleo de la
constitución que López Obrador presentará el 1 de diciembre.
Se tratará, dijo Ortiz Pinchetti en entrevista con Milenio, de un conjunto de consejos, de
observaciones sobre la conducta colectiva y la individual que no tendrán efectos jurídicos. En este sentido,
apela, al igual que Reyes, a la vigilancia interior
de la conciencia.
“Es una reflexión sistemática de por qué es tan importante la ética y la moral en la convivencia humana (...) lo es en el sentido de que la virtud es lo que produce la felicidad." José Agustín Ortiz Pinchetti.
El principal eje de la constitución moral de López Obrador es el respeto que cada ser humano se debe a sí mismo, el de
la dignidad de la persona, basado en la lección V, De los
respetos, de Reyes: "Lo primero es el respeto que cada
ser humano se debe a sí mismo, en cuanto es cuerpo y en cuanto es
alma. A esto se refiere el sentimiento de la dignidad
de la persona. Todos los hombres son igualmente dignos, en cuanto a
su condición de hombres, así como todos deben ser iguales ante la ley. El
hombre debe sentirse depositario de un tesoro, en naturaleza y en espíritu, que
tiene el deber de conservar y aumentar en lo posible."
En este sentido, manifestó Ortiz Pinchetti, López Obrador puede marcar el sesgo que le va a dar a su gobierno que
es, básicamente, "recuperar la ética, el respeto por nosotros
mismos."
Explicó que el documento apela a la laicidad y actualizará lo que hizo Reyes en 1944, "en forma
muy fina, muy respetuosa, sintetizar las ideas
principales sobre el buen vivir", como una especie de
"ampliación respecto a los derechos que han crecido y las formas de
convivencia más tolerantes de las últimas décadas en la sociedad".
El documento de Reyes pondera la voluntad moral para
humanizar más y más al hombre. "En los individuos y en los
pueblos el no perder de vista la moral significa el dar a todas las cosas su
verdadero valor dentro del conjunto de los fines humanos. Y el fin de los fines
es el bien, el blanco definitivo al que todas nuestras acciones apuntan",
se lee en la cartilla.
La constitución moral de AMLO recogerá los respetos de Reyes
que van desde la obligación que tenemos con nosotros mismos, como la obligación
que tenemos con la naturaleza y con la humanidad.
Se prevé que esta guía que busca mostrar "cuál
es el corazón mismo del nuevo gobierno" sea breve, como una especie de pequeño folleto, y que sea repartida de forma masiva, explicó Ortiz.
“Ahora
bien, la humanidad no podría subsistir sin obediencia a los respetos morales.
En la inmensa mayoría de los casos, el solo hecho de obrar bien nos permite ser
más felices dentro de la sociedad en que vivimos” Alfonso Reyes.
