Vistas a la página totales

jueves, 14 de diciembre de 2017

Buen día a ellos ya Ellas, definitivamente todos los días se aprende algo, que hermoso ¿verdad? La nueva tipología del turismo se sigue actualizando. Ahora, el Investigador Francisco Muñoz, doctor en Ciencias Económicas y Empresariales utiliza el término de Turismo de Sequía, que en parte se refiere a la resurrección de poblados que quedaron bajo las aguas de los pantanos y que a decir de él, empiezan a mostrar el espectáculo de su vida pasada. Pues en Sonora no nos quedamos atrás, este tipo de situaciones se han vivido en algunas localidades del Estado, que bien pudieran ser objeto de promoción turística para quienes deseen investigar antecedentes, tipos de cultura y hasta hechos históricos; tal es el caso de Batuc, fundado por los jesuitas en el año 1629, mejor conocido como Batuco viejo, en 1964 fue desaparecido por la inundación provocada con la construcción de la presa Plutarco Elías Calles, denominada presa del novillo que también afecto a Suaqui y Tepupa. Asimismo, quién no recuerda la antigua Fábrica de los Ángeles que se quemó en 1947, ubicada para el rumbo de San Miguel de Horcasitas, industria que se dedicaba a los hilos y tejidos dando trabajo a los lugareños, que en la década de los 40’s tenía una población cercana a los 4,800 habitantes; situación que sirvió como justificación para el asentamiento temporal de los poderes en el municipio de Ures. Cuando su servidor visitó el lugar todavía se erguían algunos muros; en fin, como no soy historiador, dejo a los que sí lo son abundar en los detalles y comentar si existen otras poblaciones abandonadas que pudieran ser de interés para quienes desean visitar lugares históricos. 

A continuación transcribo el artículo del dr. Muñoz, donde se refiere e esta nueva acepción del turismo:

                                                                TURISMO DE SEQUÍA
Desde tiempo inmemorial nuestro planeta azul ha brindado a los hombres (y a las mujeres, claro) incentivos para que salieran de su entorno habitual y se desplazaran hasta el lugar en el que se encontraban. Obviamente, el cumplimiento de tal deseo, o necesidad, imperioso o no, no resultaba factible. Primero era imprescindible conocer que tales incentivos existían, y, para ello, alguien tenía que haber informado de forma manifiesta. Esta función la cumplieron los viajeros.

Digamos de pasada que, en nuestro idioma, viajero es que, después de sus desplazamientos, narra lo que vio y nos hace saber cómo son aquellos lugares a los que fue, cómo son sus gentes, cómo son sus costumbres, cómo viven y cómo luchan contra las adversidades que encuentran. La Antigüedad tenía información sobre la existencia de las llamadas Siete Maravillas del Mundo. El Renacimiento puso en conocimiento de la humanidad los tesoros del Imperio Romano y de la Grecia clásica. Los autores de libros de viajes y los editores de guías de multitud de países informaron sobre las bellezas naturales y artísticas.

En una palabra, la información sobre elementos capaces de incentivar los viajes consiguió la proeza, a veces no bien valorada, de que la humanidad conociera casi todo aquello que merece en el mundo que hagamos viajes. Ha sido tal su eficacia que podríamos decir que va quedando poco sobre lo que no conozcamos su existencia.

Por eso los buscadores de incentivadores de turismo lo tienen cada vez más difícil. Y por eso es comprensible que, en un periodo tan grave de falta de lluvias algunos hayan caído en la cuenta de que la industria turística puede sacar provecho de ello poniendo sobre la mesa el llamado turismo se sequía motivado por la resurrección de aquellos pueblos que quedaron bajo las aguas de los pantanos y que ahora nos empiezan a mostrar el espectáculo de su vida pasada.

De aquí que iniciativas públicas y privadas traten de explorar un nuevo mercado en enclaves históricos emergidos de los embalses bajo mínimos. Silvia R. Pontevedra publicó un reportaje en elpais.com el pasado 4 de noviembre del cual tomo información e ilustración sobre Portomarín (Lugo), el pueblo que en 1963 quedó bajo las aguas del pantano de Belesar.

Nichos fúnebres emergidos por la sequía del embalse de Belesar en el lugar de Loio. ÓSCAR CORRAL

Hoy se ven, repartidas entre las dos orillas del Miño, las ruinas del viejo pueblo espectral que han salido a saludar a todos aquellos que se desplacen hasta ellas. Destacan los restos del camposanto de Loio, que, como apunta la reportera, “aún conserva varias filas de nichos intactos”. Cito a continuación una certera frase de ella:

“He aquí una meta del nuevo turismo de sequía que empiezan a vislumbrar Ayuntamientos y empresas del sector en diversos lugares de España". El regreso de la especie humana, en tiempos de cambio climático, a los paisajes de los que fue arrancada en el esplendor de la política de pantanos. Y mientras el alcalde popular de Portomarín ha decidido revitalizar el cauce seco señalizando los esqueléticos barrios, el socialista de Mancilla de la Sierra (La Rioja) ha recuperado la antigua romería de mayo que festejaban los vecinos en el gran pueblo que acabó anegado en 1959.

Los antaño moradores de Peñarrubia (Málaga), desalojados en 1972, han vuelto en octubre para inaugurar una ermita y refundar el espíritu del municipio borrado del mapa y ahora emergido de las aguas del embalse de Guadalteba. Y la empresa conquense Multiaventura Buendía ultima un "producto turístico" de rutas en todoterreno por el Real Sitio de la Isabela que mandó edificar Fernando VII para tratar su gota. Las visitas incluirán una aplicación para tabletas con un recorrido gráfico por el pasado de este palaciego conjunto adornado con fuentes, que acabó sumergido a finales de los años 50 y que actualmente vuelve a estar al aire porque el embalse solo alcanza el 9% de su capacidad”

El reportaje termina con esta frase entre lapidaria y un tanto cínica: “Ahora que todo está seco, hay que verlo como un recurso". En efecto, así es. Con ello se pone de manifiesto la intrínseca facultad de la industria turística de reciclar todo aquello que tuvo esplendor y que rindió evidentes servicios a la generación de riqueza y volver a darles vida gracias a quienes, con su demanda como turistas, por estrambótica que pudiera parecer a algunos, devolviéndolos a cumplir una función absolutamente inesperada.
Pensemos en las embarcaciones del pasado, en las carreteras que ya no tienen tráfico porque hay otras más seguras, en los puentes de la antigüedad, en las vías ferroviarias en desuso, en las minas abandonadas. Y, ahora, por mor de esta nueva “pertinaz” sequía, en la incentivación turística que aportan aquellos pueblos anegados durante el furor franquista de la construcción de pantanos que ahora nos muestran, un tanto impúdicamente, sus andrajosas desnudeces. Y es que el turismo todo lo aprovecha, todo lo recicla, todo lo devuelve a la vida si es que la perdió.


Y como él mismo dice: ¡Bendito sea el turismo!


lunes, 11 de diciembre de 2017

TURISMOFOBIA… ¿?


Buen día para ellos y para Ellas, el título parece película de terror, ¿verdad? Pues resulta que el turismo también puede ocasionar serios problemas en aquellos destinos que se han convertido en sitios frecuentes, y sea por los fines de semana o por periodos de vacaciones, en México encontramos algunos de este tipo, como son Cuernavaca, Morelos a la que abarrotan los visitantes tanto de la Cd de México como de otros lugares aledaños, buscando el excelente clima que priva durante casi todo el año, a pesar de los grandes problemas que se están viviendo por la inseguridad; otro de estos lugares que se ve afectado lo es Puebla de los Ángeles, Puebla, que también por su cercanía a la Capital de República es receptora en fines de semana, puentes y vacaciones de grandes cantidades de turistas; este fenómeno se aprecia en varios estados de la Federación y Sonora no es la excepción, en San Carlos Nuevo Guaymas podemos apreciar esta situación que fastidia a los residentes permanentes del puerto; en fin, podemos decir que nunca estamos conformes. A este fenómeno se le ha denominado TURISMOFOBIA, que a decir del Índice de Irritación de Doxey (Irridex) es cuando un destino presenta cinco etapas de acuerdo a lo siguiente:
1. Euforia.- Los visitantes son bienvenidos, hay oportunidades para la población local, y los flujos de dinero nuevo – pero hay poco de planificación.
2. Apatía.-Los visitantes se dan por sentados y  se convierten en objetivos de lucro. El contacto se hace más formal.
3. Molestias.-Saturación se aborda, con mucha gente visitando el destino para que siga siendo divertido – especialmente en la temporada alta. Esto hace que los residentes locales a comenzar a tener dudas sobre el turismo. Planificadores de tratar de resolver este problema mediante el aumento de la infraestructura en lugar de limitar el crecimiento.
4. Antagonismo.-Abrir la irritación (incluyendo a veces fuertes niveles de aversión), pero la planificación es de recuperación. La promoción es mayor para compensar el deterioro de la reputación de destino. Los turistas se están (y probablemente sienten) engañados, sin embargo, también están siendo culpados por aumento de la delincuencia y los impuestos, y para todo tipo de problemas cotidianos.
5. Aceptación.-El lugar ha cambiado de forma permanente. El cambio es ahora aceptado por los residentes. Se han olvidado de lo que el área era antes de los primeros turistas llegaron.
En conclusión, Doxey indica que esto no tiene ninguna base científica y merece el valor que se le quiera dar.
Pues bien, resulta que los holandeses ya tomaron cartas en el asunto y están buscando la forma de revertir los efectos de este fenómeno social que pareciera cosa de niños, pero que a los residentes les puede causar verdadera “irritación”, ya sea por lo abarrotado de sus calles, el sobre uso de servicios de todo tipo, falta de alimentos y las molestias naturales que causamos cuando somos parte del turismo tales como: problemas de tránsito, roces personales con la población; exceso de desperdicios y sobre todo, la prepotencia de algunos visitantes que consideran que su dinero es lo más importante y se puede decir que se sienten con la libertad de hacer y deshacer a su antojo; he aquí lo que han considerado en Ámsterdam, el país donde más libertades sociales se permiten:

Ámsterdam busca ideas para combatir exceso de turismo
Por MIKE CORDER, Associated Press Updated 9:14 am, Monday, December 11, 2017
En esta foto del 11 de mayo del 2016, la frase "Váyanse" está pintada en un mapa de rutas para bicicletas en Amsterdam. La ciudad, como otras en Europa, está siendo abrumada por un exceso de turistas que están agotando la paciencia de los residentes. (AP Foto/Peter Dejong)

AMSTERDAM (AP) — Un grupo de ciclistas se ven obligados a apretar los frenos cuando un hombre con una maleta con ruedas se detiene abruptamente en medio de una transitada carrilera para bicicletas en Ámsterdam para recoger una bolsa que dejó caer.
"Si esperamos un poco más, probablemente empezará a cepillarse los dientes”, dijo uno de los ciclistas, evidentemente exasperado.
Es una escena emblemática del problema de exceso de turismo que está atestando las calles de ciudades como Ámsterdam, Roma, Barcelona y Venecia.
La capital holandesa, con sus célebres canales, estrechas callejuelas y una red de callejones en su zona roja, está tomando medidas para combatir el problema, tratando de mantener la ciudad atractiva para residentes y turistas por igual. Pero algunos dicen que no es suficiente.
Las estadías de una noche en hoteles aquí subieron de poco más de 8 millones en el 2006 a 14 millones en el 2016. El número de visitantes a la Casa de Anna Frank ha fijado récords en siete años consecutivos, y llegó a casi 1,3 millones el año pasado.
Todos los fines de semana, el centro de la ciudad es abrumado por visitantes extranjeros en bares de mala muerte y clubes de desnudistas. Los turistas se paran a mirar a las prostitutas en la zona roja y llenan cafés donde se vende marihuana.
El concejal Udo Kock tiene un mensaje para los juerguistas: “Si la única razón por la que vienen a Ámsterdam es para emborracharse, endrogarse, miren, nosotros no podemos hacer nada para impedirlo, pero no los queremos aquí”.
No es solamente los jóvenes visitantes que llegan a bordo de vuelos baratos y se quedan en hoteles de bajo costo. Añádale a ello las muchedumbres de viajeros de un día en los cruceros que atracan cerca y los huéspedes de Airbnb que arrastran ruidosamente sus maletas por las calles adoquinadas de la ciudad, y tiene una mezcla que exaspera a los locales.
Con atracciones como el Museo Van Gogh, el Rijksmuseum y la Casa de Anne Frank, Ámsterdam tiene numerosos lugares de interés más allá de la zona roja. El turismo inyecta dinero a la economía y crea empleos, pero el impacto de millones de visitantes en una ciudad de 850.000 habitantes es alto.
"Daña el carácter de la ciudad”, dijo Kock. “Hay barrios en los que simplemente puedes ver que la gente que solía vivir allí no quiere vivir allí más”.
Ámsterdam está tratando de regular los problemas, pero Kock reconoce que no hay solución mágica. “Es un problema tan complicado que tienes que usar todas las políticas que puedas, grandes y pequeñas. Y tratar de ser imaginativo”.
Entre las medidas en consideración está suspender la construcción de nuevos hoteles, mover la terminal de cruceros lejos del centro de la ciudad, prohibir tiendas sólo para turistas en las partes viejas y prohibir las “bicicletas cerveceras”, largos bares movidos a pedal.


Como buen vecino del mundo, pondremos a remojar nuestra barba… ¿qué opinas?

viernes, 1 de diciembre de 2017


Buen día para ellos y para Ellas. Pues a decir de los expertos nos tocó el “Grupo de la Muerte”. Y no es para menos, en la inauguración del mundial a Nuestro Hermoso País le correspondió enfrentarse a nuestros eternos verdugos: Alemania, lo bueno es que será en Moscú y vamos a poder ir al juego que será el 17 de junio en el legendario: y renovado estadio de Moscú: Luzhniki, Donde se inaugurará el Mundial 2018, jugando el anfitrión vs Arabia Saudita el 14 de junio. Aquí unos datos sobre este espectacular escenario:
Capacidad: 81.000 localidades El recinto más célebre de Rusia se denominó durante mucho tiempo 'Estadio Lenin', y albergó sus primeros partidos en 1956, antes de ser sede principal de los Juegos Olímpicos de 1980. Rebautizado como Luzhniki en 1992, fue completamente renovado para que esté listo para el partido inaugural y la final del Mundial. Fue sede de la final de la Copa de la UEFA en 1999, de la final de la Liga de Campeones en 2008 y de los campeonatos del mundo de atletismo en 2013.

Los otros dos juegos de eliminatoria de Nuestro País se realizarán lejos de la Capital, difícil el traslado, tanto por la distancia como por lo económico: Estadio Rostov Arena contra los aguerridos de Corea del Sur, a 65 kms. de la frontera con Ucrania, aparte peligroso por los problemas de enfrentamientos constantes con Rusia; el tercer juego de eliminatoria será contra los rubios de Suecia que ser realizará en el estadio Ekaterimburgo Arena en los Montes Urales, a 1,500 kms. aproximadamente de Moscú. Para el supuesto e inverosímil caso de que México llegara a la final, este juego se realizará en el mismo estadio, lástima que para entonces y Dios mediante ya estemos viendo los partidos en nuestros hogares. SALUD…OS, se pronostican heladas en todo sentido.